Los artefactos indispensables para la prevención de incendios en el hogar son los detectores de humo. Su función principal es alertar a las personas de un incendio las 24 horas del día, sea que usted esté o no dormido.
Un detector de humo en actividad aumenta las posibilidades de sobrevivir en un incendio residencial. Estos dispositivos funcionan con pilas o con conexión al sistema eléctrico de la casa, cuando se alimentan de pilas deben ser probadas regularmente y remplazadas mínimo una vez al año.
La instalación de un detector de humo debe hacerse en lugares claves de la casa dentro y fuera de las áreas de los dormitorios, en cada piso de la vivienda. La vida útil de estos aparatos es de mínimo 10 años.
Al igual que los extintores o botiquines los detectores de humo son herramientas claves para prevenir o solucionar un problema de emergencia.
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